En relación a la decisión ¿Admitir la educación sexual obligatoria en la escuela? esta es una opinión de Jorge Ubeda
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Jorge Ubeda
- Filósofo. Escribiendo sobre ética
Esta es mi opinión de experto
Durante cuatro años fui profesor de adolescentes en un colegio y dediqué varias sesiones de tutoría a hablar de educación sexual. Fue una experiencia positiva para alumnos, para el colegio y, también, para la mayoría de los padres.
Entiendo la educación sexual en la escuela como la posibilidad de informar, de un modo general y lo más objetivo posible, de aquellos asuntos esenciales que inciden en la dimensión sexual de las personas. Se trata de que los alumnos incorporen la dimensión sexual con libertad y responsabilidad y, que además puedan entender que hay diversas maneras de vivir la sexualidad en una sociedad plural. Además se puede incidir que en las relaciones sexuales heterosexuales hay implicado siempre la posibilidad de un embarazo. El embarazo, en el caso de los adolescentes, es una situación que se debería evitar y no hay mejor manera que la educación sexual.
También se debe tener información sobre las enfermedades de transmisión sexual. Finalmente conviene reflexionar con los alumnos de aquellos valores que deberían presidir las relaciones humanas, incluidas las sexuales: respeto al otro y consentimiento libre. En todo caso, no creo que la escuela haya de entrar en cuestiones de educación en técnicas sexuales. Parece más recomendable que tal cosa se deje al libre descubrimiento y experimentación de los interesados.
