En relación a la decisión ¿Contribuir a causas sociales en la declaración de la renta? esta es una opinión de Antonio Cubero Truyo
- Antonio Cubero Truyo
- Derecho
Esta es la opinión del experto
En algunos paísess se puede ser solidario con una parte de nuestros impuestos. La opción de contribuir a la Iglesia Católica y sus causas sociales es una opción válida, siempre que se presente como una medida transitoria para alcanzar, en el futuro, la autogestión de esta institución religiosa.
El académico Antonio Cubero realiza un análisis sobre la contribución para fines sociales de la declaración de la renta. Específicamente, estudia la contribución que se hace a la Iglesia Católica. Para Cubero, “queda claro que los fondos transmitidos como consecuencia de la opción tienen carácter público” y se cuestiona si el Estado debe financiar a la Iglesia Católica, y a otras religiones, puesto que éstas deberían buscar la autofinanciación para sus misiones. En este sentido, el especialista indica que es un compromiso de la Iglesia el alcanzar su autofinanciación, y así lo ha explicita al indicar que “la Iglesia Católica declara su propósito de lograr por sí misma los recursos suficientes para la atención de sus necesidades. En este sentido, Cubero indica que la colaboración entre la Iglesia católica y el Estado tendrá un carácter esencialmente transitorio, por lo que es interesante que la ciudadanía tenga la opción de decidir o no contribuir a la Iglesia Católica y sus causas sociales. “Es importante recalcar este aspecto porque en el sistema de asignación tributaria se prevé [la contribución] como un mecanismo transitorio hacia la deseable autofinanciación de la Iglesia”, plantea el experto.
En este sentido, la opción de que la ciudadanía pueda contribuir a causas sociales, y a la Iglesia en particular, en la declaración de la renta tiene un sentido y sería “evitar los perjuicios que para la Iglesia supondría la pérdida repentina de la financiación directa que ésta recibía del Estado” respetando así las causas sociales que ésta gestiona. Al mismo tiempo, el académico nos recuerda que “el compromiso de España de colaborar con la Iglesia Católica en la consecución de su adecuado sostenimiento económico, con respeto absoluto del principio de libertad religiosa […] y que los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones”.