Vender la propia vivienda es para muchas personas una forma de obtener dinero. La duda esta en no saber en qué momento es más rentable vender.
De querer vender tambien surge la duda de que es más rentable, si venderlo uno mismo o utilizar los servicios de una agencia y por tanto de los contactos que estas disponen con el fin de maximizar las opciones de venta, lo que ocurre es que este tipo de agencia puden cobrar una comisión.
Tras la explosión de la burbuja inmobiliaria el valor de las viviendas ha descendido. En España, un 43%. Se calcula que los precios seguirán bajando hasta 2015 y se estabilizarán hacia el 2017. En paralelo, el precio de los alquileres se está corrigiendo, también a la baja. Si se quiere desprender de una propiedad es mejor hacerlo ahora, antes de perder más valor patrimonial. Los precios de las viviendas no han tocado fondo, ya que todavía bajarán más. Los propietarios se niegan a vender al precio que tocaría –según mercado– y cada vez hay más oferta para menos demanda, al tener mucha población empobrecida y sin liquidez. Los bancos, además, no aprueban créditos y no permiten que la gente disponga de dinero para adquirir viviendas.
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Vender un activo inmobiliario y recuperar capital. Según el precio de compra y venda, recuperar la inversión y aumentar la ganancia. Si el piso no estaba alquilado, obtener beneficios económicos y dejar de pagar impuestos vinculados a esa propiedad.
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Asesorarse con un experto del sector inmobiliario. Estudiar seriamente los pros y contras de vender (o no) antes de tomar la decisión.