Algunos esperamos a la jubilación para descansar y dedicarnos al ocio; otros, al margen de la edad, desean seguir trabajando y cobrando. Para muchos el trabajo es motivo de ilusión y entusiasmo; por ello hay expertos que recomiendan mantenerse ocupados mientras la salud acompañe. Sin embargo, trabajar exige renunciar a la pensión de jubilación, un ingreso fijo mensual asegurado por el Estado.
A favor del NO, argumentos como el cansancio y el cobro de una pensión. A favor del SI, el enorme sentido que el trabajo da a nuestras vidas.
Muchas personas no conciben la vida sin trabajar. Pero la cuestión es si no habrá llegado el momento de vivir de otra manera.
2 opiniones argumentadas
- Rafael Termes Carrero
- Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras.
- María Fátima Báñez García
- Ministra de Empleo y Seguridad Social del Gobierno de España