
Hasta los trabajadores más brillantes y en puestos directivos tienen que dedicar la mayor parte de su jornada laboral a leer y contestar un gran número de correos electrónicos.
Mucha gente cree que es una pérdida de tiempo y fomenta la falta de comunicación directa entre los empleados y que, por tanto, lo mejor es limitar el tiempo que se dedica a ello. Para otros, es vital leer el correo electrónico para su trabajo, se tarde lo que se tarde.
4 opiniones argumentadas

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Ben Hammersley
- Tecnólogo, periodista, comunicador y escritor

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Sherry Turkle
- Doctora en Psicología y profesora en MIT