Podemos enriquecer nuestra formación mejorando nuestras capacidades y recursos para desempeñar tareas o cometidos. Aprender nuevos idiomas, obtener tiulaciones, certificados o carnets para ejercer actividades que encajen en nuestro perfil, pueden ayudar a mejorar nuestra estima y empleabilidad.
A veces el estudiar habiendo terminado ya una carrera puede parecer un peso inútil, un añadido que nos agobia. Pero el dinamismo de la sociedad actual quizá reclame en nosotros otro tanto.
Marta Prieto Asiron 