Cuando estamos pensando en cambiar de trabajo no podemos hacerlo a ciegas. Conviene analizar el estado del mercado laboral y, muy en concreto, el estado del sector económico al que queramos enfocar nuestra reorientación laboral antes de iniciar el proceso para asegurarnos de que nuestros esfuerzos son susceptibles de satisfacer nuestras expectativas.
Si el sector al que queremos cambiarnos está saturado, más valdría saberlo antes de quemar nuestras anteriores posibilidades.
Durante el desempleo aumenta la preocupación sobre nuestro futuro profesional, planteándonos la necesidad de visualizar las distintas opciones laborales que se tenemos, tanto en nuestro sector profesional habitual como en otras actividades hacia las que decidamos enfocar nuestro esfuerzo laboral.
Así, parece lógico y prudente que antes de optar por una actividad profesional hacia la que dirigir nuestros planes de dedicación laboral, analicemos de forma exhaustiva la dinámica del mercado de trabajo para esa actividad y en general la situación por la que atraviesa el sector económico en que se encuadra dicha actividad.
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El desconocimiento de las peculiaridades de sectores económicos desconocidos para nosotros, la inseguridad que produce dicho desconocimiento, y el tiempo y esfuerzo que nos supone llegar a familiarizarnos con ellos, pueden frenarnos a la hora de considerar reorientar nuestra actividad laboral hacia sectores económicos novedosos para nosotros. Estudiar de forma exhaustiva aquellos sectores laborales que nos atraigan según nuestras capacidades y tener en cuenta los pros y los contras de cada una de ellos, nos ayudará a tomar esta decisión de una forma más consciente.
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Un análisis previo y exhaustivo de la dinámica del mercado de trabajo que atraviesa el sector económico en que se encuadra la actividad laboral hacia la que optemos orientar nuestro futuro profesional para esa actividad y en general la situación por la que atraviesa el sector económico en que se encuadra dicha actividad sería razonable para sopesar las posibilidades de éxito de un cambio de actividad.
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Determinar qué campos profesionales nos resultan más atractivos. Evaluar nuestra capacidad para reorientar nuestra trayectoria hacia esos campos. Analizar de forma exhaustiva la dinámica laboral existente en el sector económico en que encuadra la nueva actividad laboral prevista. Analizar las consecuencias profesionales, personales, económicas y demás que implique el cambio de sector económico y actividad laboral.
2 opiniones argumentadas
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Victor Maesschalck - Consultor en temas de estrategia, management y calidad
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Jose Sande Edreira
- Orientación profesional
