En relación a la decisión ¿Convertir los programas electorales en contratos con los gobernantes que ganen las elecciones? esta es una opinión de Rafael Mira Prieto-Moreno
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Rafael Mira Prieto-Moreno
- Emprendimiento y conocimiento
Esta es mi opinión de experto
Es fundamental. Los programas electorales tienen que reflejar las preferencias de los electores y los compromisos que con ellos se adquieren. La elección de un gobernante no puede ser un cheque en blanco durante cinco años, sin posibilidad de reclamación por parte de los votantes.
Tenemos que romper el círculo vicioso de que "prometo lo que sea para ganar", sabiendo que "no lo voy a poder cumplir", y lo que es más grave, que "no me va a pasar nada". Cuando ocurre esto, estamos generando un doble perjuicio a la sociedad.
Por un lado, no le contamos al principio la realidad de las cosas, y las medidas que es necesario tomar. Por otro, estamos dando el ejemplo de que el cumplimiento de los compromisos no es una auténtica responsabilidad. En los tiempos que corren, períodos de cuatro a siete años, son demasiado largos para la evolución de una sociedad. Si el programa electoral fuera como un contrato, obligaría a definir una serie de indicadores que nos permitieran contrastar y evaluar el nivel de desempeño de las personas que la sociedad ha elegido para organizar la convivencia social.
Esto les obligaría a los políticos a centrarse en conseguir las cosas, y no tanto en perpetuarse y cuidar su imagen social. Obviamente esto no significa que, en función de las circunstancias sobrevenidas, no tuviera sentido incumplir algunas de las promesas o fijar otras prioridades, informando debidamente a la ciudadanía. Y en su caso, consultándola. Las tecnologías sociales darían transparencia a esos indicadores.
