En relación a la decisión ¿Creer que la Biblia no contiene error? esta es una opinión de Julio Cezar Lazzari Junior
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Julio Cezar Lazzari Junior
- Máster en Teología
Esta es la opinión del experto
Cuando se habla de la inerrancia bíblica afloran discusiones sobre la cientificidad de la Biblia. Pero la inerrancia también se refiere a errores de interpretación del Viejo Testamento por parte de los autores del Nuevo Testamento. Pero ello no impide creer en su mensaje, amarla y practicarla.
En el debate sobre la inerrancia de la Biblia afloran discusiones históricas que comparan las narraciones bíblicas con la historia secular.
Aparece así un grupo que defiende la historicidad de cada relato con base, por ejemplo, a los descubrimientos arqueológicos. En sentido contrario se encuentran aquellos que afirman que la Biblia no se sustenta mediante un análisis de la historia de otros pueblos.
También afloran los debates en los que se mezclan ciencias como la astronomía, la biología o la física. A pesar de que muchos teólogos sostengan que la Biblia no se debe interpretar como un libro que contenga afirmaciones científicas, lo cual sería un anacronismo, muchos afirman que las verdades bíblicas no son apenas religiosas sino también científicas.
Los que defienden el carácter científico de la Biblia argumentan que el Génesis se debe interpretar literalmente, o sea, que el mundo fue creado en seis días, que la muerte entró en el mundo con la muerte de Adán, etc. Así cuando haya discrepancias entre las argumentaciones defendidas por la ciencia y lo que afirma el relato bíblico hay que optar por el segundo.
El tema de la inerrancia bíblica implica una serie de cuestiones complejas, abarca también la interpretación de los textos bíblicos y el conocimiento de algunas ciencias.
Sin embargo este autor, no se centra en los errores científicos, sino en los errores de interpretación del Antiguo Testamento contenidos en el Nuevo Testamento. Analizando algunas referencias del Antiguo Testamento ve que los escritores del Nuevo Testamento dan un sentido diferente del que el autor veterotestamentario pretendía originalmente.
Por ejemplo Julio César Lazzari analiza entre otras, un pasaje paulino, 1Cor 9, 8-10:
«¿Digo esto solo como hombre? ¿No dice esto también la Ley? En la ley de Moisés está escrito: "No pondrás bozal al buey que trilla". ¿Se preocupa Dios por los bueyes o lo dice enteramente por nosotros? Sí, por nosotros se escribió esto, porque con esperanza debe arar el que ara y el que trilla, con esperanza de recibir del fruto».
En este pasaje, afirma Lazzari, Pablo defiende su derecho y el de Bernabé de recibir sustento y beneficios materiales por su trabajo de predicación de la Palabra, para argumentarlo cita un pasaje de la Ley, Dt 25, 4:
«No pondrás bozal al buey cuando trille»
El contexto en que se encuentra este pasaje del Deuteronomio indica algunos preceptos que deben cumplir los judíos, algunas normas como azotar a un hombre culpable de alguna falta (Dt 25, 1-3), la obligación de un hombre de casarse con su cuñada cuyo marido hubiera fallecido sin dejar hijos -se conoce como Ley del Levirato- (Dt 25, 5-10)…
Así el texto citado por Pablo, que trata del cuido de los bueyes (Dt 25, 4), no parece que tenga sentido alegórico, como él interpreta, ya que todo el contexto se refiere a situaciones reales de la vida del pueblo hebreo. Se trata de leyes que tienen como objetivo solucionar problemas que ellos vivían. No hay nada en el texto o en su contexto que sugiera una interpretación diferente a ésta.
Este es apenas un ejemplo, se podrían encontrar muchos más.
Un análisis serio nos ayuda a interpretar la Biblia de forma más lúcida y honesta, y así podemos entender mejor aquello que el texto bíblico quiere decir.
En cambio, si tuviésemos como presupuesto inicial la doctrina de la inerracia bíblica como criterio inflexible, a menudo tendríamos que modificar el sentido de ciertos pasajes para que se adecuasen a este criterio. De esta forma se perjudicaría la comprensión del mensaje.
Sin embargo, concluye este autor, que no hace falta presuponer que la Biblia está exenta de errores para sacar provecho de ella, creer en su mensaje, apreciarla, amarla o practicarla.
Fuente: Lazzari Junior, Julio Cezar. «Problematizando a doutrina da inerrância bíblica: uma análise exegética da presença da Bíblia Hebraica no Novo Testamento». Revista de Cultura Teológica 20:79 (2012), p. 101-126.
