En relación a la decisión ¿Superar el miedo a la muerte? esta es una opinión de Joan Corbella Roig

Sí

• Joan Corbella Roig
• Psiquiatría

Esta es mi opinión de experto

“Todo lo que es desconocido provoca temor, pero si además es irreversible y representa la imposibilidad de retorno, es lógico que produzca miedo”. Pero hay que tener en cuenta que “la muerte es una condición inherente a la vida, y sólo ella da sentido a muchas de las angustias y tensiones que nos persiguen”.

“Sin el miedo a la muerte desaparecerían muchos de los esquemas de comportamiento del ser humano: desde el instinto de conservación al sentido de aprovechamiento del tiempo y de la transitoriedad de la existencia”. De hecho, “la preocupación y el miedo que hay detrás de la muerte ha dado pie a uno de los máximos fenómenos culturales de la civilización: las religiones.” “Las religiones tienen precisamente adeptos en la medida en que dan respuesta a esta cuestión”.

“Vida y muerte van inexorablemente unidas; la no aceptación de la una implica la no aceptación de la otra. Difícilmente puede no tenerse miedo o temor ante la muerte, aunque sí es posible superarlo”. “La muerte provoca una serie de reflexiones y emociones, y es una fuente de recuerdos y sentimientos que, a menudo, ponen en marcha situaciones personales de crisis”.

“El miedo a la muerte se confunde con el propio miedo a vivir. Con el miedo a la muerte se vinculan los miedos a la enfermedad, al sufrimiento, a la vejez…”

“Vivimos en un mundo plagado de peligros vitales, accidentes de carretera, inseguridad ciudadana y enfermedades”, “vivimos permanentemente al lado de la muerte, pero también tendemos a verla como un hecho distante, algo que sólo es de los otros: son los otros los que mueren; parece como si no estuviera en nuestro camino. No se trata de tener la muerte presente de forma obsesiva pero sí que cualquier planteamiento vitalista debe incluir el hecho de asumir con plenitud la condición mortal de la vida”. “Son muchas las personas que, llegado el momento, dicen: “a mi no me da miedo morir, lo que me asusta es sufrir””.

“Cuando el individuo dice esto, de alguna manera se está autoengañando: en realidad le gustaría que no le diera miedo la muerte. Pero dado que verbalizando este temor implica una serie de planteamientos, que a menudo no sabe por donde empezar, le es relativamente fácil transportar el miedo a la muerte al miedo al sufrimiento”.

Hay que superar el miedo a la muerte ya que “es inadmisible que la muerte sea ajena a la conciencia humana y se viva de espaldas a ella, pero es igualmente inadmisible que se le permita introducirse en la propia realidad personal hasta el extremo de inhibir iniciativas, impulsos, ilusiones y entusiasmos”.