En relación a la decisión ¿Perdonar a un amigo? esta es una opinión de Jordi Cussó Porredón

Imagen de Jordi Cussó Porredón

Esta es mi opinión de experto

Aceptar mis limitaciones, aceptar con humildad ser quien soy y como soy, un ser que me equivoco y que hago el mal, me hará también más tolerante con las equivocaciones y los errores de los demás. El perdón forma parte de la amistad y ejercerlo nos da la capacidad de conservar a nuestros amigos

Las personas humanas somos limitadas y, como tales, por más que nos esforcemos y pongamos toda la buena voluntad que queramos, siempre nos podemos equivocar y cometer errores. El ser humano, nos guste o no, es un ser capaz de hacer el mal. Tenemos que aceptar este hecho, y sin caer en falsos pesimismos ni enfadarnos más de lo que sea necesario, vivir reconciliados con esa realidad. Yo y mis amigos cometemos y cometeremos errores, no entender esto es imposibilitar la amistad. No podemos pedirle a la gente lo que no puede dar, ni exigirle a nuestros enemigos que jamás nos fallen o que siempre acierten en el trato hacia nosotros.
 
No entender que somos limitado nos lleva a a idealizar a las personas y las relaciones interpersonales. Engrandecemos, magnificamos a las personas y a la misma amistad. Porque pensamos que si nuestros amigos son "maravillosos" son más fácilmente creíbles, más dignos de nuestra confianza y sobretodo de nuestro amor. Luego cuando descubrimos los errores, las miserias, es decir lo que realmente son, viene las decepciones y los desengaños. Se nos hace difícil pedir perdón y perdonar, porque e el fondo nos da miedo aceptar que somos seres que cometemos errores y hacemos daño a los demás. Es un cierto acto de soberbia no querer perdonar a un amigo, es vivir pensando que nosotros nunca actuamos mal, que no cometemos errores. La capacidad del perdón nace de darse cuenta de los propios errores, de que alguna vez alguien no tuvo en cuenta el mal que hicimos y nos perdonó.
 
Aceptar mis limitaciones, aceptar con humildad ser quien soy y como soy, un ser que me equivoco y que hago el mal, me hará también más tolerante con las equivocaciones y los errores de los demás.Solo el que se ha sentido verdaderamente perdonado tiene la capacidad de acoger los errores de los demás, de acercarse a la miseria humana y a las situaciones limites de la vida sin escandalizarse. Perdonar las ofensas de los amigos es un algo que debiera ser normal, pues todos mis amigos son tan limitados como yo. No puedo exigirles lo que yo tampoco puedo dar ni asegurar. El perdón forma parte de la amistad y sobretodo ejercerlo nos da la capacidad de conservar a nuestros con el paso del tiempo

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