
Resulta curioso pensar que muchas personas visitan habitualmente páginas pornográficas con fotos, películas, contactos, direcciones de tiendas eróticas, etc. Pero es algo que prácticamente nunca reconocerían ante nadie. Hay quienes lo hacen como un escape a su realidad y otros en cambio por simple curiosidad, pero todos en general, lo hacen en secreto.
Tal vez, a pesar de las apariencias, en nuestra sociedad el sexo sigue siendo un tabú. O quizá la forma de satisfacerlo por medio de pornografía, añada un plus de vergüenza para muchas personas.
En cualquiera de sus formatos, el contenido sexual explícito tiene enorme éxito. Aunque su calidad -fotográfica, artística o cinematográfica- sea a veces muy escasa, eso no le resta público. Es un mercado que mueve cantidades ingentes de dinero en todas las monedas, pero en pocos casos los usuarios reconocen abiertamente ser consumidores de este tipo de material.
4 opiniones argumentadas

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Pere Estupinyà
- Periodista Científico - Autor S=EX2 "La Ciencia del Sexo"

- Anónimo
- En Dontknow desde Septiembre de 2016

- Anónimo
- Yo si la he visto pero ya puedo visualizar el daño que ha causado en n

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José Lázaro
- Profesor de Humanidades Médicas, UAM. Escritor.