
Hasta la adolescencia y la edad adulta, las personas pasamos la mayor parte de nuestra vida en el colegio. La importancia del periodo escolar abarca las relaciones personales, la madurez y sobre todo la formación.
En este sentido, lo ideal es que la enseñanza pública no sea sólo un espacio limitado a formar académicamente -transmitiendo conocimientos-, sino un lugar donde enseñar a convivir y potenciar capacidades sociales como el diálogo, la colaboración y la responsabilidad.
2 opiniones argumentadas

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Miguel Soberon Mainero
- Profesor Universitario

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Carmen Martínez González
- Pediatra.Magíster en Bioética