
Reír en un ambiente laboral, cuando la ocasión lo permite, puede ser beneficioso. Las personas pasamos miles de horas en el trabajo y en ocasiones vivimos momentos de tensión que pueden verse distendidos con la risa.
Pero hay que marcar unos límites. No se trata de reírse de los demás o de perder el control a carcajadas, quizás sólo es cuestión de tomarse las cosas con sentido del humor, en la medida de lo posible, para hacer más llevadera la jornada laboral.
6 opiniones argumentadas

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Miguel Mira Prieto-Moreno
- Marketing y Comunicación

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Alberto Guzmán
- Máster Universitario en Terapia de Conducta

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Rafael Mira Prieto-Moreno
- Emprendimiento y conocimiento

- Jesús de la Fuente Santamarina
- Trabajador, cómico y una persona feliz

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Leticia Soberón
- Doctora en comunicación social - redes
