Algunos expertos destacan que es importante para la comprensión de conceptos, el hecho de consultar con otros compañeros, contribuyendo a la motivación por el estudio. De ahí que algunos jóvenes se planteen ejercer su solidaridad con otros compañeros con dificultades para el estudio.
Ser solidarios puede estar al alcance de nuestra mano. Entre estudiantes, por ejemplo, puede darse en el hecho de ofrecer aquellos conocimientos que para la persona pueden ser más fáciles de comprender que para otros.
Esto se puede realizar de una forma individual o bien formando parte de un grupo de estudio en el que sus integrantes comparten sus trabajos y sus recursos. Si se sigue la premisa “Muchas cabezas son mejor que una”, una fuente de ayuda muy importante para el estudiante es el punto de vista de otros acerca de las materias. Según algunos expertos las capacidades de una persona pueden ayudar a otros y las de esos otros pueden ayudarlo a él. En el hecho de compartir habilidades se daría cierta reciprocidad. Pero otros expertos destacan que no siempre es beneficioso estudiar con otros alumnos. Esto dependería de las materias a estudiar y del mismo individuo. Colaborar con los compañeros es muy positivo pero debemos hacerlo bien y evitar el riesgo de distraerse con los amigos y amigas al estar estudiando. Se destaca que inevitablemente hay un trabajo individual que se debe hacer por sí solos, como el hecho de subrayar libros, hacer resúmenes, hacer esquemas, mapas conceptuales, repasos, etc.
-
El hecho de que en grupo puedan distraerse y no cumplir con los objetivos de estudio puede ser un freno a la hora de reunirse para estudiar. Por otro lado, la inseguridad en los conocimientos propios puede inhibir a las personas a compartir lo que saben por temor a dar una información errónea o guiar de una forma equivocada al resto de compañeras y compañeros. Por otra parte, entre adolescentes, el temor identitario a ser etiquetado como el “sabelotodo” puede frenar a que se ofrezcan a ser solidarios en este sentido.
-
Que no se generen sinergias de apoyo entre compañeros y compañeras y que se acentúe el individualismo y la competitividad como valores dentro del aula. Por otro lado, que la persona no disponga de otros puntos de vista diferentes al propio puede empobrecer la lectura de la realidad. Asimismo, genera un beneficio para quien realiza el servicio porque siente la utilidad de su acción, y se genera un beneficio para la persona que es ayudada porque puede comprender de mejor forma los conceptos. Por otro lado, el ser solidario en este sentido implica para la persona tiempo y esfuerzo, lo que también debe ser considerado a la hora de apoyar a otras personas de la clase.
-
Valorar los conocimientos que se poseen, la disposición del resto de la clase para el estudio y asegurarse de tener tiempo y metodologías apropiadas para guiar a otros en su proceso de estudio. Razonar sobre los pros y los contras de apoyar a personas en la clase.
2 opiniones argumentadas
- Elizabeth F. Barkley
- Académica y experta en aprendizaje colaborativo
- Frank Arteaga Pupo
- Académico, experto en aprendizaje colaborativo