
Es posible prepararse para reconocer, afrontar y abordar una crisis. Para hacerlo bien contamos con nuestras capacidades y, por otro lado, la habilidad que podemos adquirir. No existen crisis idénticas, pero sí la aparición de rasgos similares a la hora de gestionarlas.
Formarse para afrotar una crisis es fáctible y, de hecho, en muchos programas de formación para directivos es un apartado relevante. La preparación para abordar una crisis minimiza los daños y puede marcar la diferencia entre sobrevivir o sucumbir a ella.
3 opiniones argumentadas

-
Leticia Soberón
- Psicóloga

-
Jorge Ubeda
- Filósofo, profesor, emprendedor

-
Rafael Mira Prieto-Moreno
- Emprendimiento y conocimiento