
La aceptación de los demás empieza por la aceptación de uno mismo. Nuestro hijos deben tolerar los puntos débiles de su personalidad para aprender a tolerar los de los demás. Fomentarles que se auto-acepten es una buena fórmula para fortalecer su maduración personal.
De esta manera estarán capacitados para decidir qué hacer con su vida y tomar las riendas, siguiendo el camino que consideren más adecuado sin tener que ir a remolque de las circunstancias.
2 opiniones argumentadas

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Anca Balaj
- Educadora infantil y juvenil en riesgo de exclusión social

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Leticia Soberón
- Psicóloga