
La fidelidad es la capacidad de cumplir las promesas hechas. Los textos sagrados a menudo presentan múltiples promesas de Dios sobre un futuro mejor para los que son fieles a Él. Pasa el tiempo, y parece que poco cambia. De ahí que hay quien se pregunta si Dios es fiel y cumple sus promesas. Los textos sagrados y los representantes religiosos suelen hacerse eco de las promesas divinas, sean para ésta o para la otra vida. Según ellos Dios jamás dejará de cumplir sus promesas, principalmente para los que le son fieles.
La historia de la humanidad, sin embargo, parece a veces contradecir estas promesas dado que muchas veces el mal prevalece sobre el bien, y otras tantas veces los pobres siguen pobres mientras los ricos más ricos. Los fuertes y poderosos más fuertes y más poderosos. Hoy hay inocentes que siguen sufriendo, y pequeños que no ven reivindicada su causa.
Esta decisión hace plantear a algunas personas, la naturaleza de la fidelidad de Dios e incluso se cuestionan qué quiere decir que Dios cumple sus promesas.
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Creer que Dios es fiel a sus promesas es un presupuesto que se puede obviar fácilmente. No tiene mucho sentido creer en un Dios que no sea fiel. Sin embargo, esta forma de pensar puede justamente llevar a que no se plante la decisión de forma seria. Además, creer que las promesas divinas son siempre algo del futuro tampoco ayuda a contrastar la realidad del mundo con las creencias que se profesan.
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Decidir que Dios no es fiel a lo que promete, abrirá la puerta a cuestionar el significado de obedecer y incluso de creer en Dios, pues ¿quién querrá relacionarse con quien no es de fiar? Por otro lado, decidir que Dios es fiel implicará buscar en el pasado y en el presente de la humanidad la presencia de esa fidelidad. Este ejercicio también conllevará abrazar el reto de entender la relación que existe entre fidelidad de Dios y libertad humana.
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Un reflexión profunda de esta temática y eventos que plantean la cuestión de forma cualificada serán de gran utilidad. La abertura mental será relevante en la medida que nos puede llevar hacia horizontes donde la fidelidad de Dios no significa necesariamente la realización de las expectativas humanas, por más nobles que sean. Entender que Dios puede optar por cumplir sus promesas primariamente a través de las personas también puede ser un perspectiva que ayude a la toma de decisiones.
4 opiniones argumentadas

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Xiskya Valladares Paguaga
- Religiosa, Filóloga y Periodista

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Joseph Aloisius Ratzinger
- Teólogo

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Hafid Ahmed Bermejo
- Imán de la Mezquita de Granada

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Yechiel Z. Eckstein
- Rabino