
Las relaciones personales son complicadas. A lo lago de nuestra vida nos encontramos con personas más o menos afines a nosotros y en el trabajo ocurre lo mismo. Cuando se trata de competir por un puesto mejor o un ascenso, los otros candidatos se convierten en "el enemigo", sobre todo si es realmente importante para nosotros conseguirlo.
La actitud más normal es intentar ir mejor preparado y contar con la mayor información posible sobre los requisitos que se solicitan. Lo lógico es querer superar al oponente para ganar, pero no siempre tiene que ser así. También podemos facilitar datos al otro que beneficien a ambos.
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4 opiniones argumentadas

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Luis Carvajal Higueras
- Abogado

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Isaac Hernández Vargas
- Director de Google Enterprise para España y Portugal,