En un mundo cada vez más globalizado, cada área geopolítica tiene un peso y un papel que jugar. Los gigantes de Asia y los de América parecen arrinconar el papel de Europa. El envejecimiento de la población y el desencanto respecto a sus políticos debilita la cohesión de los países europeos.
La decisión consiste en impulsar lo más posible un protagonismo de Europa en el panorama político mundial que la haga remontar la caída actual de su influencia.
Aunque la mitad de Ucrania está arriesgando mucho con tal de estar en Europa, muchos de los ciudadanos de los países miembros están desencantados del proyecto europeo. La cuestión es si este desencanto tiene bases y si no estaremos desperdiciando una oportunidad histórica de relanzar Europa en el escenario mundial.
2 opiniones argumentadas
- Luis Huete
- Profesor IESE Business School
- Giovanni Grevi
- Economista. Director ad interim de FRIDE