Dentro de un mismo territorio pueden coexistir dos o incluso más lenguas de forma oficial. Esto puede generar malestar en aquellas personas que únicamente conocen su lengua materna y no hablan la otra u otras y por tanto pueden tener dificultades para comunicarse en determinados momentos.
Por otra parte, la coexistencia de varias lenguas aporta riqueza cultural a ese territorio.
La lengua es el medio por el cual nos entendemos los seres humanos. Cuando no se comparte la misma lengua, no existe comunicación. Si eso sucede dentro del mismo territorio, las fricciones pueden ser mayores. Lo normal es que una de las dos personas de ese hipotético encuentro sepa hablar la lengua materna del otro y la situación se resuelva, pero puede ocurrir que no sea así o que uno de ellos no quiera, y se puede producir un malestar o rechazo hacia esa situación de coexistencia de varias lenguas.
2 opiniones argumentadas
- Leticia Soberón
- Doctora en comunicación social - redes
- Jorge Ubeda
- Doctor en Filosofía