En relación a la decisión ¿Pedir la epidural en el parto? esta es una opinión de Montserrat Bayego i Salvador
- Montserrat Bayego i Salvador
- Comadrona consultora y Enfermera pediátrica
Esta es mi opinión de experto
Comadrona y madre, considero el proceso del nacimiento un proceso vital humano fisiológico. Quizás debiera escribir en el lado del NO por ser acérrima defensora en teoría y práctica del parto sin anestesia. Pero en tanto que dicho proceso es tremendamente personal escojo el SI con diversos matices.
Como comadrona y madre considero el proceso del nacimiento como un proceso vital humano fisiológico. Quizás debiera escribir en el lado del NO por ser acérrima defensora en teoría y práctica del parto sin anestesia. Pero en tanto que dicho proceso es tremendamente personal, escojo el SI con diversos matices.
Que la epidural exista significa un avance técnico que nos proporciona buenas soluciones en muchos casos en que la anestesia sea necesaria. No solo en el ámbito obstétrico.
Si nos centramos en este ámbito, debemos preguntarnos ¿cuándo será necesario administrar anestesia epidural para que una mujer pueda parir de la forma más saludable posible para ella y el hijo/a que va a nacer?
¿Que es necesidad? ¿y desde qué perspectiva debe valorarse? ¿desde la profesional o desde la de la usuaria y su familia?
Por supuesto no vamos a cuestionar la indicación médica de una anestesia epidural. Sino que vamos a defender el derecho a pedirla de cualquier madre que considere que la necesita.
Y aquí, el concepto necesidad cambia respecto del professional. Una comadrona/n, un/una obstetra, aconsejarían epidural cuando hay que instrumentalizar el parto, sobre todo, pero también en muchas otras situaciones en que quizás un correcto acompañamiento sería suficiente para sobrellevarlo.
La necesidad expresada por la mujer puede enraizar en el miedo a lo que desconoce, en la incertidumbre sobre como se va a desarrollar el nacimiento de su criatura, en la inseguridad por sus propias capacidades, en el dolor cuando no se tienen recursos personales para transcenderlo,.......no necesariamente porque algo vaya mal y la anestesia sea imprescindible.
El nacimiento como proceso debiera ser educado desde la infancia. Explicado como lo que es: un tránsito hacia la vida de gran intensidad física i emocional. De gran transcendencia por lo que seria bueno que todas las personas implicadas lo vivieran en plena consciencia i vivencia.
El modo como se habla del parto i se muestra en la literatura i en el cine, así como se transmite en las familias, a menudo no és el más apropiado. Y va tejiendo en la memoria unos sentimientos y actitudes que en la mujer que va a parir van a aflorar de forma poco favorable al desarrollo saludable del proceso. Debiéramos reflexionar sobre ello y reaccionar como sociedad para mejorar la "cultura del nacimiento".
Dicho lo anterior, considero que SI hay que poder pedir la epidural, pero es labor importante de todas/os las/los profesionales y de toda la sociedad, educar, informar, acompañar adecuadamente y de forma efectiva para que sean muy pocas las mujeres que necesiten la epidural para traer al mundo a su bebé. Y que sean mayoría las que, obviando situaciones de necesidad obstétrica auténtica, deseen y consigan un nacimiento de sus hijos/as en plena consciencia y disfrute de este proceso vital.
Madre, hijas/os, familia, son protagonistas. La mujer, la principal, es quien debe y ha de poder decidir SI o NO epidural. Los profesionales a su lado honestamente, con humildad, aportando nuestro "saber hacer".